miércoles, 29 de diciembre de 2010

Balance anual

Que extraño este 2010. Un año para el olvido dirán algunos. Yo siempre lo tendré en el recuerdo.

Empezó, como todos, cargado de ilusiones y termina para muchos con desesperación. El año de la CRISIS, esa palabra que conjuramos y repetimos para hacerla responsable de todos los males que padecemos. Nadie se acuerda de CONSUMO, ESPECULACION, CORRUPCION, CODICIA, etc. Nadie quiere mirarse a uno  mismo y lanzar el “mea culpa”. Siempre estará la crisis para culparla de todo lo que hemos perdido.

Mal año por la pérdida de referentes. Mal año por la desconfianza. Y mal año por el recorte de derechos y libertades. En definitiva, mal año, en el que temblaron la bases en las que se asientan muchas de mis convicciones.


La dualidad de mi pensamiento me lleva unos días del pesimismo más desalentador al optimismo militante. Algo bueno debe salir de esto, me impongo. Es imposible, reflexiono.

Los nuevos ogros con los que nos asustan, los mercados, nos esperan insaciables detrás de las esquinas de la esperanza para advertirnos y recordarnos que los nuevos tiempos serán como ellos quieren que sean y no como nosotros creíamos que eran. Están ahí para espantar cualquier atisbo de ilusión renovada, de confianza en nuestra capacidad para construir el futuro que deseamos.


Llegaron los tiempos del miedo. Miedo al paro, al recorte social, a Alqaeda, a los inmigrantes, a que no haya pensiones, al futuro, al miedo mismo. Nos han inoculado el miedo y va a ser muy difícil desembarazarse de él. Ese miedo a todo lo desconocido, a todo aquello que no nos muestre la publicidad y la televisión. Ese miedo que se contagia como una epidemia y que, una vez infectados, permite controlar a las sociedades. Eso es lo que nos encontraremos en el transfondo de esta crisis.

Me niego a tener miedo. Busco una vacuna rodeándome de gente que me conforte, me enseñe y me ayude a ser mejor. No quiero tener, quiero ser. Ahí encontraré el antídoto a toda esta desesperanza.

No me rindo, no puedo rendirme. No quiero más recortes sociales, ni el más mínimo. No quiero que la soberanía conquistada por la incansable lucha de muchos sea pisoteada por fondos de inversión impersonales a los que les da lo mismo que un niño haga un balón de futbol en china o que una niña se prostituya en Bangkok, siempre que obtengan el doble de beneficio que en el balance del ejercicio anterior.

No. No quiero olvidar este año. No debo. Si lo hiciera, olvidaría a las víctimas que ha ido dejando en el camino y a quienes lo han compartido conmigo.


Quiero recordarlo también por las satisfacciones que me ha dejado, que también las hubo. Muchas. El año en que los trámites de nuestra adopción llegaron a Rusia. El proyecto de fin de carrera. El Judo. La memoria. Ana. El padel. Escribir. Los lobos. La fotografía. Leer. El trabajo. La familia. Las truchas. Los amigos. Las amigas. Las redes sociales. Las lesiones. El compromiso renovado. Las nuevas ilusiones. El Desavío.

La foto de mi perfil resume bien este año. Ana la hizo en la playa de Berria, frente al Penal de El Dueso, después del llanto del recuerdo y el consuelo de su abrazo y la paz de sus besos, de escribir en la arena lo que me ha de deparar el futuro, rodeado de gente a la que quiero y que me quiere.



Sigo vivo, no me rindo y puedo contarlo. Bienvenido 2011, te estaba esperando.


13 comentarios:

zuritana dijo...

Hay amigo,hasi estamos much@s ,k año mas malo y k desesperanza llevamos acuestas , k miedo me da el futuro incierto k nos acacha. k le contamos ha quien le quiten la ayuda de 400 k le daban y ni siquiera llegaba pal mes. no tenemos ni libertad pa respirar ,pero bueno esperemos un cambio y sino lo reventamos to komo dice un buen amigo un poko burro . feliz año y k los sueños de las buenas gentes se cumplan , saud compañero amigo

Antonino Sanz Matencio dijo...

Enriok dijo ....

Pues ánimo y a hincarle el diente, amigo. Lo que escribes es precioso, lo podría suscribir como propio.
Sólo añadiría que se va ese año y nos deja su enseñanza... no caigamos en la trampa... si nos engañan de segundas ya sería por nuestra culpa.


(lo borré sin darme cuenta, lo incluyo de mi puño y tecla)

Anónimo dijo...

Amigo. Me he emocionado (con lágrimas incluso). Comparto contigo esos momentos de angustia y de ilusión. Hoy lo veo todo un poko más negro y no confio en que quienes nos han metido en este jaleo sean capaces de sacarnos. Está lloviendo a mares.
Un besote enorme.
Unos vemos mañana.

Antonino Sanz Matencio dijo...

Yo creo que los que están intentando sacarnos de esto no son precisamente quiene nos han metido en esta situación, lo mismo que quienes lo están pagando no son necesariamente los culpables.

Ana dijo...

Para el 2011 quiero dejar de soñar, para que los sueños se conviertan en pasos de gigante y así poder avanzar en el camino

rafalito carmona dijo...

No me refería en concreto a ningún partido político. Unos nos metieron, otros nos matuvieron. Los unos nos mintieron, los otros no nos dijeron la verdad. Unos nos estan intentando sacar con medidas más propias de los otros. Los otros critican y no apoyan aquello que harían si fueran ellos los otros. Y por encima de unos y de otros estan realmente los que mandan. ¿Y donde quedamos nosotros?.
Parece que ha escampao.

Antonino Sanz Matencio dijo...

Pagando los platos rotos y empapados!!!

pepa dijo...

según el diccionario de la real academia española miedo significa perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario,puede que a algunos les convenga que tengamos miedo aunque sea imaginario. Animo te lo digo desde mi pesimismo vital. Como dice Almudena Grandes "frente al pesimismo de la razón, el optimismo de la voluntad". Besos y abrazos fuertes.

Diego Santiago dijo...

Qué bien escribes! Felicidades. Feliz 2011, feliz 2012, feliz 2013... Y un Abrazo.

covadonga dijo...

Coño Antonino!!!! que jartita me tienes con tanto hacer lloar con tus cositas, que bonito y que real!!! Feliz año nuevo y me gusta el balance relalista del 2010. Me lo copio... bueno menos lo del proyecto final, jejejeje y el judo!!!!
Besos pa los dos que os quiero mucho!!!!

Anónimo dijo...

Querido sobrino: Despues de demostrarte mi incapacidad para operar en esto de las "Nuevas Tenologías", he seguido un rato más en el ordenador y me he ido al "Desavio", con ello he repasado el balance que haces tan certero como emotivo que, cualquiera puede hacer suyo, y aunque, tambien esperanzador, me ha llenado de congoja, emoción y rabia.

Congoja porque he visto en tu blog la verdad dura y descarnada. La verdad sin esperanza que es como decir, la verdad sin futuro.

Esto es lo que nos han marcado los mercados(como tu bien dices): Bonanza para mi cuando el tiempo es bueno, y miseria para los demás cuando la crisis echa raices como en los tiempos que corren. Nos engañaron. Siempre nos engañan.

Ahora el miedo está aqui y con ello la deseperanza. La desesperanza en la sociedad es a lo que nos han llevado quienes mandan, quienes nunca cuenta ni quieren contar con los ciudadanos. Ahora, nos dicen, mejor agarrarse a un clavo ardiendo que morir abrasados. Sin importarle si moriremos abrasados

Yo te digo que no te rindas. Que no nos podemos rendir. Cuando alguien se rinde toda la sociedad pierde. Cuando grita, puede que alguien despierte. Entonces todos ganamos

Yo hoy, aqui en la noche y que hace poco hablaba contigo, quiero unirme a ese grito y poner mi granito de arena de afecto y de cariño, ayudandote a empujar con toda esa gente que quieres y que te quiere.

Con el perfil que hizo de ti(que no conozco), tu mujer y compañera, Ana, frente al Penal del Dueso, me pongo a llorar recordando a nuestros antepasados.

Un abrazo para los dos.

josé manuel

Énriock dijo...

Pues ánimo y a hincarle el diente, amigo. Lo que escribes es precioso, lo podría suscribir como propio.
Sólo añadiría que se va ese año y nos deja su enseñanza... no caigamos en la trampa... si nos engañan de segundas ya sería por nuestra culpa.

Unknown dijo...

El miedo es la herramienta con la que intentan mantenernos quietecitos y sin rechistar. ¡No caigamos en la trampa! El miedo es ignorancia. Contra el miedo, conocimiento.